¿Pueden las pymes ser digitales? Cómo conquistar este mercado

Si las estadísticas son ciertas, un 81% de las pequeñas y medianas empresas tiene serios problemas. La mayoría se está quedando anquilosada al no marcar como prioridad la digitalización. De hecho, solo un 19% de estas compañías tiene un plan para digitalizarse, según se expone en la Radiografía de la Pyme 2018 (España). La falta de un plan para llevar a cabo la transformación digital a la que ya se han sumado las grandes superficies solo podría tener como consecuencia el cierre de los pequeños negocios por no haber sabido adaptarse al mundo digital.

Una empresa que quiera ser competitiva debe saber adaptarse a la transformación digital que está viviendo el mundo del comercio. La tecnología es una ventaja competitiva que puede ayudar a conseguir más clientes a las pymes, a mejorar los procesos de venta y, entre otras cuestiones, a facilitar la interacción del consumidor con el empresario, por lo que es mucho más fácil obtener una plena satisfacción del proceso de compra.

Hasta ahora, la falta de presupuesto y de ayudas públicas para la digitalización de las pymes eran las principales trabas de estos negocios para adaptarse al mercado digital. (…).

 

 

Claves para digitalizar la empresa

Digitalizarse no es una opción, sino una necesidad. Cuando se parte desde cero a veces es complicado saber por dónde empezar, sobre todo, cuando anteriormente no se han destinado ni recursos ni presupuesto a este fin.

Si no se dispone de una partida presupuestaria importante para llevar a cabo la transformación digital de la empresa que implique contratar a profesionales para ayudar en este sentido, lo más conveniente sería invertir en cursos de formación. No se puede tener un negocio digital sin personal preparado para conducirlo hacia el éxito.

Formar a los trabajadores en cómo manejarse en un entorno digital es una de las mejores inversiones que se pueden hacer. Incluso hay cursos gratuitos que se ofertan online en plataformas MOOC u otros del Servicio Público de Empleo sobre marketing en Internet que podrían servir de base para empezar a tomar las riendas del mercado digital y sin invertir un euro.

¡Comparte el dato! Únicamente un 19% de las empresas tienen un plan para digitalizarse, según la Radiografía de la Pyme 2018 elaborada por Sage.

Uno de los primeros pasos para digitalizar la empresa es pensar en los buscadores. La mayoría de los internautas recurren a uno de los más populares, Google, cuando necesitan buscar información o un producto. Si la pyme consigue aparecer en la primera página del buscador, es muy probable que consiga un cliente más. Eso sí, a la hora de hacer SEO, la pyme debe analizar primero quiénes son sus clientes, su perfil profesional, demográfico, la edad, así como su comportamiento en Internet.

 

Blog, redes sociales, «fondo de armario» básico para una pyme digital

Aparte, es aconsejable crear un blog donde se aporte contenido de valor y en el que también se trabajen las palabras clave con las que se quiere posicionar el negocio. Una herramienta muy útil para estudiar estas palabras clave es el planificador de palabras de Google Ads. En función de los resultados, el empresario deberá trabajar en posicionar esas palabras clave junto a sus productos y el contenido que comparta en Internet.

Vender a través de las redes sociales es ya una realidad. Y es una realidad que también deben implementar las pymes. Incluso en algunas redes sociales se puede hacer publicidad de los productos a un mínimo coste, por lo que si no se dispone de mucho presupuesto para publicidad, ésta podría ser una excelente alternativa.

En redes sociales, menos es más. La necesidad de estar presente el negocio en estas plataformas no quiere decir que la pyme tenga que tener cuenta en Youtube, Facebook, Twitter, Instagram, Linkedin… no. Todo depende del tipo de consumidor y de negocio. Los bares y restaurantes y las tiendas de moda, por ejemplo, suelen tener productos muy visuales, por lo que tienen cuenta en Facebook e Instagram, principalmente, ya que son dos redes sociales en las que la imagen es lo primero. En el caso de establecimientos turísticos, por ejemplo, también se suele añadir Youtube, para compartir vídeos sobre eventos, y Linkedin, si optan a conseguir clientes más profesionales, en el caso de que organicen eventos para empresas.

Un dato bien medido es un paso hacia el éxito. Medir los resultados de las acciones que se lleven a cabo otorga a la empresa la capacidad de comprobar si las acciones que ha desarrollado son o no las adecuadas y, lo más importante, si están teniendo éxito o todo lo contrario. El mundo digital cambia constantemente por lo que las estrategias que tal vez un mes surten efecto, el mes siguiente puede que no den los mismos resultados.

 

Invertí en ciberseguridad

En Internet no todo es de color de rosa. Estás siempre expuesto a que un hacker tome el control de tu página web y borre bases de datos. Un informe Pandalabs alerta de que el 60% de las empresas que han sido atacadas por fallos de seguridad no se recupera del mismo. De ahí que sea importante adoptar medidas en los equipos de trabajo como programas antimalware, usar métodos de encriptación adecuados al establecer un sistema de pago online en la tienda virtual o establecer contraseñas largas que combinen elementos alfanuméricos para evitar que sea demasiado sencillo descubrirla y cambiarlas cada cierto tiempo.

Muchos empresarios lo ven así: digitalizarse o morir. Las pequeñas y medianas empresas no tienen por qué quedarse sin disfrutar de las ventajas de adaptar sus negocios a un mundo que cada vez opera más en Internet. Mantener una tienda física y disponer también de un canal de ventas online hará que muchas pequeñas empresas que tal vez estaban abocadas al cierre, tengan un lugar donde conseguir nuevos clientes no solo de su ciudad de origen, sino de otras partes del país, reduciendo costos innecesarios y mejorando la atención al cliente.

Con constancia y trabajo en el mundo digital, el éxito está garantizado.

 

Rocío González

Periodista ‘todoterreno’ y community manager multidisciplinar. Amante de la comunicación en todas sus vertientes.

 

Fuente Blog Sage España